Reino Unido no es un país mundialmente conocido por sus playas de aguas cristalinas y blanca arena. Tampoco lo es por ser un destino caluroso donde tostarse al sol. Pero eso no quita que tenga playas muy bonitas, con un encanto especial, y dignas de visitar. Así que aquí te presentamos la playa de Crosby. Una de esas playas curiosas que puedes apuntar en tu agenda si alguna vez visitas Liverpool.

La playa de Crosby, también conocida como Iron Man beach, es una playa muy pintoresca, que se encuentra en el pueblo de Crosby, al norte de Liverpool, a tan solo 20km de la ciudad. Esta playa no es apta para el baño, pero eso no impide que siempre haya un montón de gente paseando por ella, y disfrutando de las maravillosas vistas que ofrece.
Qué puedes encontrar en esta entrada
Another place, la obra
La mayor particularidad de esta playa, y lo que la hace tan especial, es sin duda la exposición de esculturas «Another Place» que consiste en 100 esculturas de hierro con forma humana, que se encuentran instaladas a lo largo de 3.2km de playa. Dentro y fuera del agua.

Cada estatua mide 189 cm pesa alrededor de 650 kg, y son réplicas del cuerpo desnudo del propio autor, Antony Gormley. Todas ellas se encuentran de cara al mar, mirando al horizonte. Ocultándose y apareciendo a medida que la marea sube y baja. Por eso dependiendo de cuándo visites la playa, puede ser que no siempre tengas la misma experiencia.
Pero la playa de Crosby no fue la ubicación inicial de la exposición. La primera vez que la obra vio la luz, fue en 1997 en la playa de Cuxhaven en Alemania, seguida de Stavanger en Noruega y De Panne en Bélgica. Terminando finalmente en esta peculiar playa cerca de Liverpool.
La verdad es que la obra siempre ha estado rodeada de polémica. Primero porque las estatuas representaban a un hombre desnudo y a gente las calificaba de pornográficas. Luego por motivos de seguridad, medioambientales y de intereses económicos. La realidad es que tras muchas discusiones, en 2007 se aceptó la petición de dejar las estatuas permanentemente en la playa de Crosby. Desde entonces, se han convertido en su símbolo, y un auténtico reclamo turístico.

Miles de personas se acercan al año a visitar esta preciosa playa, atraídos precisamente por esas estatuas que tanta controversia generaron. Es una playa ideal para ir en familia e incluso para llevar a tu perro. Ya que está permitido que la visites con tu mascota, siempre que tengas cuidado de que no moleste a las aves.
Para nosotros esta playa nos trae muy buenos recuerdos, ya que fue uno de los primeros sitios que visitamos cuando nos mudamos a Manchester hace ya más de 7 años. Recuerdo que de aquella las estatuas estaban más nuevas, y con menos vida a su alrededor.

Cuando hemos vuelto a visitar esta playa este verano, nos ha parecido que tiene todavía más encanto. Como muchas de las estatuas se sumergen en el agua cuando sube la marea, están llenas de mejillones y percebes. Ocultando totalmente el hierro del que están hechas. Esto que hace que sean todavía más bonitas, y que se le encuentre más sentido a la obra.

Eso sí, si visitas la playa tienes que tener cuidado con dos cosas. Por un lado la arena es bastante blanda y en algunas zonas puede llegar a ser un poco en plan arenas movedizas. Éste era uno de los motivos por los que les parecía peligroso dejar las estatuas permanentemente y que viniera tanta gente a visitarla.
Cuándo visitarla
La parte buena de que no sea apta para el baño, es que es un sitio ideal para visitar durante todo el año. Tienes que tener en cuenta que Liverpool está bastante al norte de Inglaterra, así que las posibilidades de que llueva, durante todo el año, están ahí.
Siempre ten cuidado con las mareas, y respeta la señalización. Como he comentado más arriba, la arena es muy blanda y es fácil hundirse en ella. Así que aunque la marea esté muy baja, no intentes ir a ver las estatuas que están más al fondo, porque puedes quedarte enterrado por el camino.

Nuestra recomendación es que la visites a última hora de la tarde. Te des un paseo por la playa, esquivando debidamente las medusas, y esperes hasta el atardecer. La imagen de las estatuas junto al mar, con el sol ocultándose en el horizonte, es un auténtico placer para los sentidos.
Cómo llegar
En coche
Si vienes desde Liverpool, tienes que coger la carretera A565 paralela a la costa y en menos de 20 minutos estarás disfrutando de un paseo por esta curiosa playa. Además hay zonas de aparcamiento gratis en Cambridge Road, Mariners Road y Hall Road.
Autobús
Desde el centro de la ciudad, en la estación de autobuses de Queens Square, puedes coger el autobús número 53, que te llevará en unos 40 minutos al pueblo de Crosby. La parada en la que te tienes que bajar es ‘Waterloo – Crosby North Road‘, y puedes consultar la ruta completa y los horarios en este enlace.
Generalmente en Reino Unido los precios del billete de ida. y vuelta suelen ser mucho más baratos que si los compras por separado, y además suelen tener pases de día, que en muchas ocasiones te sale más económico. Puedes entrar en la página de Stage Coach Bus, para consultar las tarifas y rutas completas.
Tren
Desde la estación central de Liverpool, puedes coger un tren que tardará unos 20 minutos en llegar a Crosby. Tienes dos paredes en las que te puedes bajar: Waterloo, si quieres bajarte al comienzo de la playa, o Blundellsands & Crosby, que te dejará más o menos en la parte central de la playa.
Los puedes comprar los billetes en la propia estación, o a través de internet en la página de National Rail, o Train Line, que es la que suelo usar yo para comprar los billetes de tren.